Nunca pude despejar la niebla
con mis manos, ni con mi boca,
ni con mi cuerpo entero.
Nunca supe lo que había
en tu corazón, ni cuál la herida
ni cual será el remedio.
Nunca los números fallan
nunca mienten, nunca
ocultan la verdad.
Nunca se equivocan
de dirección los miembros
que se van a abrazar.
ohh
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