No tengo hambre.
No me duele ninguna parte del cuerpo.
Y aún así, algo me incita
a la lujuria de la gula.
A la avaricia de la pereza.
Será que los pecados
vienen en dosis dobles.
Será el insomnio
del profeta ateo.
martes, 28 de junio de 2016
domingo, 26 de junio de 2016
Una piedra golpea una cara, una espalda
No dormirán más
sobre sus caballos quietos.
No señalarán al cielo
con la llama en el dedo.
No se quemarán
los pájaros del paraíso.
El escorpión no avisa
del veneno de los días.
Los fogosos no piensan
en la venida del incendio.
Los cangrejos no anuncian
los vaivenes de las mareas.
Tú que rompes las olas
y calmas las tormentas
traes el silencio del diluvio.
sábado, 21 de mayo de 2016
Mirar fijamente a la luna
La luna llena
y nosotros vacíos,
cubiertos de sombras.
Durmiendo en las mismas camas.
Adorando a los mismos dioses.
A ninguno.
Amando a otros hombres
como aves de paso.
Viéndonos en otros ojos,
cegándonos de otras cegueras.
La luna está llena doce
veces al año. La luna nueva
lo destruye todo.
Nos inundan ríos por atravesar.
Nos descose una hebra que une.
A nadie.
Nos trocean el cuerpo entero,
como carniceros del hambre.
Mirándonos con otras caras,
tocándonos con otras manos.
La luna llena,
y nosotros mirándola,
dispersos por el mundo.
y nosotros vacíos,
cubiertos de sombras.
Durmiendo en las mismas camas.
Adorando a los mismos dioses.
A ninguno.
Amando a otros hombres
como aves de paso.
Viéndonos en otros ojos,
cegándonos de otras cegueras.
La luna está llena doce
veces al año. La luna nueva
lo destruye todo.
Nos inundan ríos por atravesar.
Nos descose una hebra que une.
A nadie.
Nos trocean el cuerpo entero,
como carniceros del hambre.
Mirándonos con otras caras,
tocándonos con otras manos.
La luna llena,
y nosotros mirándola,
dispersos por el mundo.
Ríos por atravesar
Siento el espacio que sobra
en la almohada,
debajo de la sábana,
en la cama entera.
Siento el espacio que sobra
en la bañera,
en la piscina,
en el mar entero.
Siento el espacio que sobra
a tu lado en el sofá,
en el retrato descentrado,
en nuestras caras.
en la almohada,
debajo de la sábana,
en la cama entera.
Siento el espacio que sobra
en la bañera,
en la piscina,
en el mar entero.
Siento el espacio que sobra
a tu lado en el sofá,
en el retrato descentrado,
en nuestras caras.
Una hebra que une
tú que deseaste del árbol sus frutos
tú que deseaste del paraíso el pecado
tú que sobrevolaste
el mar sin queroseno
el amerizaje fatal
tú que fuiste revolcado
por las mareas
y las turbulencias
tú que regaste
las flores del mal
las nocturnas aves
ahora vuelvo de volar
vuelvo de volver
vuelvo al deseo insoportable
tú que deseaste del paraíso el pecado
tú que sobrevolaste
el mar sin queroseno
el amerizaje fatal
tú que fuiste revolcado
por las mareas
y las turbulencias
tú que regaste
las flores del mal
las nocturnas aves
ahora vuelvo de volar
vuelvo de volver
vuelvo al deseo insoportable
domingo, 8 de mayo de 2016
No hay dios en tu ermita, las joyas han perdido su presencia
Hago de mi cuerpo refugio
para las bombas nucleares,
pero sé que lo sabes,
puedo detectar metales.
Radiografío nuestros abrazos,
los ocho brazos del pulpo.
Nos besamos en las encías del mar,
en la comisura de la última ola.
Me cubre de cobre la cobra,
la cebra de la amnesia.
para las bombas nucleares,
pero sé que lo sabes,
puedo detectar metales.
Radiografío nuestros abrazos,
los ocho brazos del pulpo.
Nos besamos en las encías del mar,
en la comisura de la última ola.
Me cubre de cobre la cobra,
la cebra de la amnesia.
sábado, 30 de abril de 2016
Cuando escribo, con frecuencia, aparece la segunda persona, el tercer hombre, la idea de sombra
Te visualizo entre los ojos
como un hueso de aguacate,
aprieto los planetas
que se me plantaron,
frunzo el ceño,
trenzo la leña.
Y ahí estás tú,
recto como un tronco de palmera,
con una vara en la mano
y en la otra desnudo.
Me parpadeo,
me mareo en tu imagen codificada
como un beso secreto en la mejilla
antes de irse por la mañana.
Me cuelgo del árbol que me salió
del entrecejo fruncido de trenzas
y me dejo esperar por el futuro.
Te me presentas cada noche
con los porcentajes de la luna
que me hizo doblar el poblado.
Me cruzo con todas las segundas
personas en los mismos puentes.
Todos tienen la misma sombra
que me colma de colmo la calma
que me cubre de cobre la cobra.
como un hueso de aguacate,
aprieto los planetas
que se me plantaron,
frunzo el ceño,
trenzo la leña.
Y ahí estás tú,
recto como un tronco de palmera,
con una vara en la mano
y en la otra desnudo.
Me parpadeo,
me mareo en tu imagen codificada
como un beso secreto en la mejilla
antes de irse por la mañana.
Me cuelgo del árbol que me salió
del entrecejo fruncido de trenzas
y me dejo esperar por el futuro.
Te me presentas cada noche
con los porcentajes de la luna
que me hizo doblar el poblado.
Me cruzo con todas las segundas
personas en los mismos puentes.
Todos tienen la misma sombra
que me colma de colmo la calma
que me cubre de cobre la cobra.
lunes, 18 de abril de 2016
Todo lo que está vivo, sea cual sea su concepto de vida, está ligado al concepto de salud
sueña conmigo
sueña a mi lado
como si nos mirasen
todos los espejos
del mundo
sueña a mi lado
como si nos mirasen
todos los espejos
del mundo
viernes, 15 de abril de 2016
Observo el mapa con la tranquilidad de conocer la ciudad y todos sus callejones
[Poema no lineal: no hay ningún orden entre las cuatro estrofas, puedes leerlas a tu libre voluntad]
Llegados a este punto
una manada de tigres podría
despedazar carne entre
los columpios de mis costillas.
Podría crecer como las estrellas
de mar o la hidra del lago:
con la higiene del bisturí
separando las malas hierbas.
Llegados a este punto
podría profetizar el reino
de la tierra en los cielos
contaminados de queroseno.
Podría cortar los hilos
que cosen la piel al tórax,
la emergencia de la imagen
de la ninfa voladora.
Llegados a este punto
una manada de tigres podría
despedazar carne entre
los columpios de mis costillas.
Podría crecer como las estrellas
de mar o la hidra del lago:
con la higiene del bisturí
separando las malas hierbas.
Llegados a este punto
podría profetizar el reino
de la tierra en los cielos
contaminados de queroseno.
Podría cortar los hilos
que cosen la piel al tórax,
la emergencia de la imagen
de la ninfa voladora.
jueves, 14 de abril de 2016
La cuestión no es si podrías acostumbrarte a esto, la cuestión es si quieres hacerlo
I. Previsión de daños posibles
Te lo pueden indicar las señales
de las carreteras.
Te lo puede anunciar la virgen
por televisión.
Te pueden llegar flashes de la luz
que nos iluminó.
Puedes nadar en un mar de símbolos
y morir ahogado.
Puedes soñar con los jardines
que no recorriste.
Puedes colgarte en la cruz
de los caminos
y esperar.
Y repensar el pensamiento
que atraviesa la carne
como una bala:
podrás ver los estragos
del fuego cruzado.
II. Previsión meteorológica
Recibe la crecida.
No pongas presa
a las inundaciones.
Las vías del poder
son más estrechas
que las del querer.
martes, 12 de abril de 2016
Mirar fijamente al sol produce lágrimas, daños permanentes e incluso ceguera
[Poema no lineal: no hay ningún orden entre las cuatro estrofas, puedes leerlas a tu libre voluntad]
Te asomas por la puerta blanca.
Tu mano es una garra de águila.
Arañas sin prisas la capa
de pintura dejando un triple surco.
Aprendiste demasiado pronto
a embarazar el silencio con gemido
de tenebrosas aves, de cuervos
cegados por el sol.
Te asomas por la puerta blanca.
Un halo te rodea, halcón alado.
Ostentas el disco solar
que deja estelas en la retina.
Aprendiste demasiado pronto
a ser de la negra noche
las nocturnas aves, del búho
la videncia ciega.
Te asomas por la puerta blanca.
Tu mano es una garra de águila.
Arañas sin prisas la capa
de pintura dejando un triple surco.
Aprendiste demasiado pronto
a embarazar el silencio con gemido
de tenebrosas aves, de cuervos
cegados por el sol.
Te asomas por la puerta blanca.
Un halo te rodea, halcón alado.
Ostentas el disco solar
que deja estelas en la retina.
Aprendiste demasiado pronto
a ser de la negra noche
las nocturnas aves, del búho
la videncia ciega.
sábado, 9 de abril de 2016
La paciencia del sismógrafo
escala de richter
Te despides con un abrazo sísmico. Búscame mañana
entre los escombros.
(Isabel Bono, Hielo seco)
I. EL PRIMER TEMBLOR
Donde hubo una naturaleza incontrolable,
done hubo una selva de insectos y carcoma,
donde hubo árboles que sobrevivieron al roce,
donde hubo vacas sagradas sangrantes,
donde comenzó el primer estigma,
y se abrió un agujero negro en los cielos.
Allí, donde crecieron la hiedras a las que
llamamos los muros de nuestra casa.
Donde nacieron los hijos que no tuvimos,
y murieron los padres que no nos tuvieron.
Allí, donde criamos a los animales que
llamamos nuestros herederos.
II. EL SEGUNDO ENTORNO
El paisaje doble se refleja
en cristales que se van a romper
en sombras que proyectan
bombillas a punto de fundido.
Todos nosotros agazapados
en el estómago de la gran máquina,
en la maqueta hiperrealista
de la arquitectura imaginaria.
Todos nosotros a escala,
esperando la llegada de la criba,
el tambaleo del descarte progresivo,
el siguiente nivel de la escala de Richter.
III. EL TERCER TRUENO
Hay un obelisco en el desierto
erguido sobre arenas movedizas.
Con cada terremoto se hunde
como un puñal en la carne.
Recorres con camellos
la tela dorada de mi cuerpo.
Con dromedarios sin andrómeda
descubres lo real del espejismo.
Hay un obelisco que refleja
la luz del eclipse en la cúspide.
Con cada fuego se incendia
como una antorcha en el pecho.
miércoles, 6 de abril de 2016
La mujer de los sueños me dice que todo va sobre ruedas
Cuatro angelitos tiene mi cama,
cuatro angelitos me acompañan.
Como una dolorosa cruzando
la calle a hombros de los hombres.
Velan por nosotros, encienden
velas que desvelan a los faraones.
Repelen al monstruo que mata
a los niños que no pueden dormir.
El espacio se expande en el nuevo
templo de los sarcófagos abiertos.
El tiempo se contrae en la antigua
iglesia de los santos cristos muertos.
cuatro angelitos me acompañan.
Como una dolorosa cruzando
la calle a hombros de los hombres.
Velan por nosotros, encienden
velas que desvelan a los faraones.
Repelen al monstruo que mata
a los niños que no pueden dormir.
El espacio se expande en el nuevo
templo de los sarcófagos abiertos.
El tiempo se contrae en la antigua
iglesia de los santos cristos muertos.
sábado, 2 de abril de 2016
Nos vamos de nuestros cuerpos, somos profetas en tierra ajena
He rebobinado nuestros gritos,
he radiografiado nuestros abrazos,
algo está mal.
he radiografiado nuestros abrazos,
algo está mal.
jueves, 31 de marzo de 2016
El mar en calma no trae peces muertos
Acampan a los pies de la cama,
a las faldas de los montes,
a los vuelos de las bandadas,
a las cabezas del ganado.
Los ángeles volantes de los vestidos,
los árboles germinados de los desnudos,
los hombres que cruzaron los puentes
con animales muertos a las espaldas.
Los que entornan las puertas del tiempo
sin cerrarlas; los que traen una luna
llena y otra vacía; los que no doblan
las campanas ante el ataque del enemigo.
Hubo hombres que desearon
el fuego sin quemarse; gran virtud
la del lejano viajero que nunca
quiere regresar a la misma boca.
viernes, 25 de marzo de 2016
Hay tres mujeres bailando entre las cruces del monte Gólgota
Cuando bailas cangrejos
en las mareas del futuro.
Cuando bailas cebras
en las mareas del pasado.
Eres tú en todos los tiempos.
Cuando bailas campanas
al ritmo de los monasterios.
Cuando bailas incensarios
al ritmo de las ermitas.
Eres tú en todas las religiones.
Aunque baile el equilibrio
de las balanzas inestables,
aunque baile el contenido
de los vasos comunicantes.
Eres tú en todas las medidas.
Cuando bailas no hay dobles,
más que en los espejos
o en las sombras pero
no son más que ecos.
Eres tú en todos los nombres.
https://www.youtube.com/watch?v=ooXRjqeJMIg |
jueves, 24 de marzo de 2016
Ninguna norma amalgama mi esquema rimático porque ninguna norma amalgama mis emociones
Con la ayuda de la luz del gran rayo,
con la piel de los grandes animales que no murieron en el deshielo,
con los ojos de los videntes que fueron martirizados,
con el retroceso diario de los calendarios invertidos,
he podido olvidar.
Los días en los que la luna os hacía grandes,
lo que os iluminaba la cara cuando sacabais los dientes,
los animales pequeños que no paraban de emigrar y de crear nuevos poblados,
los ojos que nos mirábamos ocupando espacios,
he podido recordar.
He podido matar a la bestia de los rencores,
con agravios de monedas que brillaron
he podido cegar los ojos de las medusas,
con la espada de todos los sanjorges,
he podido vencer.
La doble sombra de los que murieron en el río,
la cara oculta de los que blasfemaron sobre la palabra,
las lunas que pasaron los lobos solitarios esperando la batalla,
los días y los dioses de noche con las esquinas invertidas,
he podido sentir,
un dolor en el pecho,
un sueño premonitorio
del pasado que vaiviene,
el recuerdo de estar vivo:
he podido regresar.
con la piel de los grandes animales que no murieron en el deshielo,
con los ojos de los videntes que fueron martirizados,
con el retroceso diario de los calendarios invertidos,
he podido olvidar.
Los días en los que la luna os hacía grandes,
lo que os iluminaba la cara cuando sacabais los dientes,
los animales pequeños que no paraban de emigrar y de crear nuevos poblados,
los ojos que nos mirábamos ocupando espacios,
he podido recordar.
He podido matar a la bestia de los rencores,
con agravios de monedas que brillaron
he podido cegar los ojos de las medusas,
con la espada de todos los sanjorges,
he podido vencer.
La doble sombra de los que murieron en el río,
la cara oculta de los que blasfemaron sobre la palabra,
las lunas que pasaron los lobos solitarios esperando la batalla,
los días y los dioses de noche con las esquinas invertidas,
he podido sentir,
un dolor en el pecho,
un sueño premonitorio
del pasado que vaiviene,
el recuerdo de estar vivo:
he podido regresar.
sábado, 19 de marzo de 2016
Si la luna es de Lorca, que no salga nunca más
Toda luna oculta su peligro.
La luna creciente y su anhelo.
La luna llena y sus toros.
La luna blanca y su plenitud.
La luna roja de sangre.
La luna menguante de la lejanía.
La luna negra de la muerte.
La luna nueva de la amnesia.
viernes, 18 de marzo de 2016
El negativo y sus copias, el proceso de revelado
''Y nuestros rostros,
mi vida,
breves como fotos''
John Berger
·
Me nombras en otros rostros,
me tocas en otros cuerpos.
Llegamos a ser los mismos.
Tu boca en bucle que me habla,
que me besa, que me quiere,
que me aleja y me dispara.
Pero son las mismas bocas
en otras palabras; las mismas
palabras en otras bocas.
Pero mi cuerpo ya no es
el mismo, ya no está unido
al nombre de tu rostro.
jueves, 17 de marzo de 2016
La luz conecta la doble piel de los mares
Te asusta el fondo del mar,
el suelo de los animales submarinos,
el abrazo de la medusa.
Te asustan mis brazos
en forma de salvavidas,
mi mirada subacuática.
Te asusta el vaivén
de los barcos, el vértigo
de los aviones.
Te asustan las sombras
goteantes, la visión
del pez abisal.
Te asusta tu reflejo
que va y vuelve con la marea
como plagas migratorias.
miércoles, 16 de marzo de 2016
Rodeamos el jardín del paraíso sin atrevernos a entrar
Las especies que superpueblan
y las especies a punto de extinción.
Los golpes que se dieron
para despertar a las puertas.
La desbandada de las aves
parabólicas y sus vaivenes.
El hombre que cabalga solo
con la silueta de su sombra.
Hay una herida en mitad
del bosque, de la noche.
Intentas apartar la mirada
del costillar entre las ramas.
Dejo una cicatriz alrededor
de tu cuello amedrantado.
Hoy es el cumpleaños de mi prima Margarita
Los árboles hablan
por debajo del suelo.
El bosque de los robles,
la sombra de los dobles.
Me miras como Midas,
Dánae sin ave ni lluvia.
Tuyo es el fruto y la bestia,
el vientre de la manzana.
Tuyo es el silencio del robledal
y el mundo entre en las ramas.
martes, 15 de marzo de 2016
Hay días que me despierto con la cabeza de otro
Hace demasiado tiempo
que no te veo, pero siento
cómo te duelen las manos,
cómo te tiembla el pulso.
Doblan las campanas
anunciando un vórtice.
Hace demasiado tiempo
que no te abrazo, pero siento
tu respiración enjaulada,
los perros esperando.
Aunque te tapes la boca
para no gritar.
Hace demasiado tiempo
que cerraste las puertas
del templo, que te pusiste
de espaldas al misterio.
Aunque te tapes los oídos
para no oír los salmos.
que no te veo, pero siento
cómo te duelen las manos,
cómo te tiembla el pulso.
Doblan las campanas
anunciando un vórtice.
Hace demasiado tiempo
que no te abrazo, pero siento
tu respiración enjaulada,
los perros esperando.
Aunque te tapes la boca
para no gritar.
Hace demasiado tiempo
que cerraste las puertas
del templo, que te pusiste
de espaldas al misterio.
Aunque te tapes los oídos
para no oír los salmos.
Hace demasiado tiempo
desde que tú eres otro.
lunes, 14 de marzo de 2016
Suena la alarma, pero algo me ata a la cama, algo se sienta en mi vientre
Cuando duermo
viajo a territorios aún
desconocidos.
No soy Colón.
No soy ninguno
de sus tres barcos.
Soy el nosotros
que ya no se puede
nombrar con la boca.
Soy al que olvidé,
al que maté y al que
encendí velas.
Cuando duermo
soy el guía pagano
de la religión enemiga.
.
viajo a territorios aún
desconocidos.
No soy Colón.
No soy ninguno
de sus tres barcos.
Soy el nosotros
que ya no se puede
nombrar con la boca.
Soy al que olvidé,
al que maté y al que
encendí velas.
Cuando duermo
soy el guía pagano
de la religión enemiga.
.
domingo, 13 de marzo de 2016
Todos los años me llega la misma carta, solo cambia la fecha del remitente
Me persiguen
hombres con máscaras,
muertos a caballo.
Hombres de otros tiempos.
Les hago señas reflejando
el sol en el retrovisor.
Les ruego que se vayan.
Les digo que yo ya no soy yo.
Y entonces se van. Y entonces,
me vuelvo. Y entonces, les grito
a las espaldas, que sigo siendo yo.
Les grito que estoy vivo.
Les digo que ya no vienen
los pájaros que se fueron.
Que ya se rompió el cántaro.
Les grito que estoy solo.
Les grito que la bestia ha muerto,
y con ella la mitad de mí. El doble
poblado con sus gentes repetidas.
De vuelta: las aguas revueltas.
Me persiguen
hombres con máscaras,
atareados de estigmas.
hombres con máscaras,
muertos a caballo.
Hombres de otros tiempos.
Les hago señas reflejando
el sol en el retrovisor.
Les ruego que se vayan.
Les digo que yo ya no soy yo.
Y entonces se van. Y entonces,
me vuelvo. Y entonces, les grito
a las espaldas, que sigo siendo yo.
Les grito que estoy vivo.
Les digo que ya no vienen
los pájaros que se fueron.
Que ya se rompió el cántaro.
Les grito que la bestia ha muerto,
y con ella la mitad de mí. El doble
poblado con sus gentes repetidas.
De vuelta: las aguas revueltas.
Me persiguen
hombres con máscaras,
atareados de estigmas.
Sonríe, haz desaparecer lo cotidiano
Te veo dentro de la foto,
tu sonrisa ya no es la misma.
No pones la boca
del mismo modo.
Hay un doble de ti
que a veces se despierta
en tu boca riendo.
En tu boca reída.
Que a veces se sienta
en tu cama, que te toca.
Es tu extraño,
tu doble ruina.
tu sonrisa ya no es la misma.
No pones la boca
del mismo modo.
Hay un doble de ti
que a veces se despierta
en tu boca riendo.
En tu boca reída.
Que a veces se sienta
en tu cama, que te toca.
Es tu extraño,
tu doble ruina.
Retrato con la boca borrosa
En el poblado doble
están los hijos que no tuviste,
están todas las versiones de ti
esperándote.
Con cuchillos.
Para hacerte el amor.
En el poblado doble
todos son tigres, todos
tienen dientes, todos
comen.
Con cuchillos.
En el poblado doble
está tu madre con el plato
en la mesa, los amantes que
no te amaron.
Esperándote.
están los hijos que no tuviste,
están todas las versiones de ti
esperándote.
Con cuchillos.
Para hacerte el amor.
En el poblado doble
todos son tigres, todos
tienen dientes, todos
comen.
Con cuchillos.
En el poblado doble
está tu madre con el plato
en la mesa, los amantes que
no te amaron.
Esperándote.
Psicopombo
Los buitres, las golondrinas y los cuervos
vuelan juntos atravesando el río.
Entran en casas de ventanas abiertas,
ahogan a recién nacidos en palanganas.
Todo lo que pisan huele a enfermedad,
todo lo que tocan da señales al pararrayos.
Entran en cuerpos de heridas abiertas,
pican y carcomen las deshoras perdidas.
Adiós a los pájaros que vinieron,
viernes, 11 de marzo de 2016
Todos intentan hacer un hueco en sus agendas para estar presentes
Suenan las campanas de la iglesia,
hay mujeres llevando carros.
Dios se hace carne en la misa.
hay mujeres llevando carros.
Dios se hace carne en la misa.
Solo hay un coche en la carretera, pero todos los semáforos están en rojo
Las tiendas están cerradas,
las luces de las casas apagadas.
Los perros no ladran.
las luces de las casas apagadas.
Los perros no ladran.
Parece que va a llover pero no llueve
El hombre que gira las esquinas,
el hombre que cruza los puentes.
El hombre que cabalga solo.
el hombre que cruza los puentes.
El hombre que cabalga solo.
miércoles, 9 de marzo de 2016
Las serpientes aladas: I. Las aves ciegas
Los murciélagos
son ángeles mamíferos,
nocturnos y ciegos.
Sobrevuelan las copas
del árbol y sus frutos,
observan con la boca.
Su casa es una cueva
donde soportar la luz
del día, y los graznidos .
No son halcones
de cielo raso, ni búhos
que ululan el futuro.
No son aves migratorias,
ni tampoco son
las aves del paraíso.
El mundo visto aéreo,
volando al revés.
La tierra es el cielo
donde caer.
Las serpientes aladas: II. Los aviones averiados
Yo mismo cogí la pala
y empecé a trazar surcos.
Yo mismo diseñé los muros
del laberinto y su minotauro.
La serpiente, muda continua,
deja su piel cadáver en forma
de señales. El hilo de Ariadna.
Ahora la bestia me persigue
y me ronda por las esquinas.
Aunque alcemos el vuelo
moriremos en alta mar.
La serpiente alada no repta,
sino que duerme enroscada,
muda continua. Kundalini.
Los aviones no funcionan
para parar esta distancia.
Los kilómetros retorcidos
como un laberinto intestinal.
Las serpientes aladas: III. El Ángel Caído
Cruzamos los cielos
como compañías aéreas que van y vuelven,
como aves migratorias que van a morir.
Aunque se apague
la hoguera olímpica, el fuego prometeico,
la llama del gran faro, atravesamos la noche.
El Ángel Caído
levanta su vara contra
los oscuros. La diosa Kali
destruye la oscuridad
con oscuridad.
El Ángel Caído
me eleva a los cielos
de queroseno. Cruzamos
la piel de los mares
de la profecía.
El cristo invertido,
el mesías de la carne, la virgen de la bestia,
los fuegos que nos incendian por dentro.
Como serpientes aladas
que van a morder la manzana voladora,
la raíz del desconocimiento, lo que nos amnesia.
martes, 8 de marzo de 2016
Los vaivenes opuestos: I. Mareas
Van y vienen las olas mareadas
con sus desechos higiénicos,
con sus animales submarinos
y su suciedad transparente.
En esta tierra me bañan aguas
lodosas que me repiten nuestros
pecados en forma de tetrabrik.
Pero van y vienen las olas,
no importan sus espectros.
La marea sobrevive a la basura.
Los vaivenes opuestos: II. Amnesia
Los vaivenes de la flora y la fauna
me hacen olvidar el sentido de las flechas,
el significado de las señales,
los caminos de regreso.
Me hacen olvidar tu sombra,
lo que sentías por mí,
el lado oculto de la luna.
Me hacen olvidar el agujero,
que siempre se nos llevaba.
Me hacen olvidar el dolor.
Los vaivenes opuestos: III. Mesías
Los vaivenes opuestos se atraen,
se alargan, se letargan y se latigan.
Los vaivenes opuestos se tocan
en las esquinas de sus círculos.
Nacen desnudas en el desierto,
nacen solas para ser descubiertas
por su profecía. Son poseídas.
Nacen del revés como los albinos,
sus caminos no les pertenecen.
Son cazadas por otras vidas.
se alargan, se letargan y se latigan.
Los vaivenes opuestos se tocan
en las esquinas de sus círculos.
Nacen desnudas en el desierto,
nacen solas para ser descubiertas
por su profecía. Son poseídas.
Nacen del revés como los albinos,
sus caminos no les pertenecen.
Son cazadas por otras vidas.
lunes, 7 de marzo de 2016
Los ciclos climáticos: I. Crecida
Todo lo que hacen los pingüinos
para poder criar sus huevos
ante el frío de los icerbergs.
Todo lo que hacían los egipcios
para poder criar a sus hijos
ante la sequía de los desiertos.
Vienen los hipopótamos
con su ciénaga ciega.
Vienen los cangrejos
y sus cambios de marea.
Vienen los escarabajos
y su tierra de agujeros.
Vienen las cebras
de la amnesia.
Los ocho brazos
del pulpo.
Los ciclos climáticos: II. Temporal
La lluvia viene y va
con sus olas de frío.
Yo me dejo bailar
las aguas a fuego lento.
Tentados por la niebla,
buscan un refugio en la cima
de la montaña coronada.
Por encima de los hombres
quieren ver un cielo
de humo de bengala.
En el ojo de los huracanes
descubren la visión.
En el ojo de la tormenta
descubren la ceguera.
Los ciclos climáticos: III. Migraciones
Se van los grillos
a cualquier otro bosque.
Se van las gacelas
heridas de la autovía.
Se van los toros
que vinieron.
Se van los insectos
de los escombros.
Se van las plagas
de Egipto.
Se van los que no creyeron
en el dios opuesto, los que no
rompieron sus esquemas.
Se van los animales.
Morirán antes de llegar
a su nueva tierra.
domingo, 6 de marzo de 2016
Los buenos días: I. Los amanecidos
La madrugada rompe
la sombra y sus nuevas
sombras enraizadas.
Vence el misterio
y sus laberintos.
·
Porque cada día
viene a por nosotros,
el sol, nos salva de
los ciclos de la luna.
·
La luz calienta
la piel asolada
de los helados.
·
La meteorología
de nuestros cuerpos.
·
Los amanecidos.
Los buenos días: II. Los muertos vivientes
Los buenos días son
como irse al diablo o decir
'Jesús' tras el estornudo.
La repetición del mantra
mantenido en la boca.
·
Me dices que estás bien,
me dices que me quieres.
Me das las gracias.
·
Abre la boca muerto
viviente que la oblea
es el sol y es la luna.
·
No son buenos los días
por más que lo digas.
·
Los bucles en tu boca.
Los buenos días: III. Los resucitados
Te despertarán
las campanas del templo,
los tambores en tu puerta,
anunciando la llegada
del nuevo día.
·
Tras las tres caídas
y la espada de salomón,
alza la vista el mesías
y es cegado por el sol.
·
Los ojos visionarios
que vislumbran en la ruina
el oscuro resplandor.
·
Me dices buenos días,
con el dedo en la llaga.
·
Domingo de Resurrección.
sábado, 5 de marzo de 2016
El sexo de los ángeles: I. El Evangelio griego
El verbo se hizo carne
y habitó entre nosotros.
El mesías se hizo carne
y nos lo comimos.
El evangelio de Mateo
me anunció el futuro.
Los profetas
del canibalismo.
El sexo de los ángeles: II. El Ángel blanco
Lleva un vestido blanco,
va perdido por los bosques.
Juega al escondite,
invisibiliza la bestia,
me espera tras las esquinas.
No sabe que es
un falso profeta,
un ángel de la muerte.
Lleva un vestigio blanco,
va perdido por los bosques.
Su espalda es estrecha
como el horizonte
entre las copas de los árboles.
Las cuatro copas
donde verter el mundo
están sucias de ayer.
Me espera en la esquina
del precipicio, y me hace caer.
El sexo de los ángeles: III. El Ángel negro
Vino un ángel negro anunciando
una luna roja de sangre.
Sus espaldas eran anchas
como la visión periférica del cielo.
Derramó las cuatro copas
sobre mis cuatro hombres.
No trajo consigo el apocalipsis
sino las bienaventuranzas de la carne.
viernes, 4 de marzo de 2016
Cruce de caminos: I. El loco
Precisamente lo más valioso
se vuelve lo más dañino.
Del amor al odio hay
un precipicio.
Un principio
del laberinto morado.
El loco siempre se levanta
y se crece con la luna.
Siempre que cree haber
encontrado una salida,
vuelve a descifrar la trampa,
los muros del laberinto.
El loco siempre se niega
y se ciega con vendas.
Cruce de caminos: II. Los perros
¿Por qué le aulláis a la luna?
¿Por qué le aulláis a la luna
si no sois lobos?
¿Por qué le aulláis a la luna
si no sois lobos?
Cruce de caminos: III. El desconocido
El desconocido siembra semillas
que no son de este mundo.
El desconocido es el loco
que se desentiende de lo conocido.
El desconocido es el emperador
de la selva incontrolable.
El desconocido entiende la razón
irracional de todos los juicios.
El desconocido conoce los caminos
que separan a los amantes.
jueves, 3 de marzo de 2016
Los lenguajes encriptados: I. Babel
Una babel de voces.
-
Una babel de voces me
impide hablar en voz baja.
-
Mi voz devora perros
desde las bocas.
-
Las cosas que no dices
son las más importantes.
-
Las cosas que haces
con el lenguaje, el modo
de renegar lo que piensas.
-
Ya no necesito que nadie
rece por mí en ningún idioma.
-
Hablo caminos cuya gramática
desconoces. Herencia de lenguas
muertas. Lo que escapa al verbo.
-
El lenguaje que no muestra.
El lenguaje que oculta.
Enterrar océanos.
Los lenguajes encriptados: II. Alfabetos
[The encrypted languages: Alphabets]
Los alfabetos son una autovía Alphabets work like a highway,
por la que van y vienen on the road the wobbles
los vaivenes. go and back
Una autovía A highway
por la que vas y vienes you are going ahead and back
buscando algo. looking for something.
Por la que conduces You drive on this road
demasiado rápido so fast for
para ver las señales. watch the signals.
Una vehículo humano A human vehicle
bajo la oscuridad. under the darkness
Las estrellas invisibles. The invisible stars.
Una autovía A highway,
en la que bruscamente where we can lose
perderlo todo. suddenly everything.
Y reencontrar el ritmo,
And take rythm up again,
la velocidad desmedida,
speed without measure,
el camino a casa.
on my way home.
And take rythm up again,
la velocidad desmedida,
speed without measure,
el camino a casa.
on my way home.
Los lenguajes encriptados: III. Analfabetas
[The encrypted languages: Illiterates]
Es difícil de entender Hard to understand
lo que me dices what you tell me
si me hablas en otros if you speak others
idiomas, si usas las languages, if you use
palabras impropias. the strange words.
Es difícil conocer Hard to know
el animal de tu peligro the animal of your risk
sin sintonizar el rayo, if the ray is not tuned,
sin cortar la luna llena if the moon has not cut
en dos mitades. in half.
No podemos contar el tiempo We can not count time
con los dedos nuestras manos, with the fingers of our hands.
no podemos contar los meses We can not count the months
del año con nuestros días. of the year with our days.
No podemos contra el fuego We can not against the fire
que nos incendia por dentro, that burn down us inside.
no podemos pedir socorro We can not request help
porque somos analfabetas. because we are illiterates.
Hablamos idiomas contrarios. We speak contrary languages.
Hablamos idiomas encriptados. We speak enscrypted languages.
No podemos decirle a un tercero We can not tell to a third party
lo que nos decimos al espejo. what we tell ourselves to the mirror.
miércoles, 2 de marzo de 2016
Serie numérica: I. Incógnitas
Serie numérica: II. Divisiones
hemos vivido dos vidas diferentes
hemos vivido dos vidas divergentes
hemos dividido dos vidas diferentes
hemos divivido dos vidas divergentes
hemos dividido dos vidas difergentes
hemos vivido gentes ingentes
hemos gentílmente bebido
hemos genitalmente dividido
hemos vivido dos vidas diferentes
hemos vivido desde que desde
desde que dividimos la vida
hemos vivido desde los ingentes
hemos vivido dos vidas divergentes
hemos dividido dos vidas diferentes
hemos divivido dos vidas divergentes
hemos dividido dos vidas difergentes
hemos vivido gentes ingentes
hemos gentílmente bebido
hemos genitalmente dividido
hemos vivido dos vidas diferentes
hemos vivido desde que desde
desde que dividimos la vida
hemos vivido desde los ingentes
Serie numérica: III. Segundos
martes, 1 de marzo de 2016
Trilogía de la memoria: I. El nuevo pasado
Para los que viven
No hay ningún lugar
donde se guarden
los recuerdos que
son olvidados.
Tu pasado siempre
será nuevo. Tu futuro
siempre fue antiguo.
El ahora es nunca.
el tiempo cronológico,
el pasado se renueva
todos los días.
Los calendarios son
almacenes sin candado,
bolsillos con agujeros,
tu ropa desaparecida.
No hay ningún lugar
donde se guarden
los recuerdos que
son olvidados.
Tu pasado siempre
será nuevo. Tu futuro
siempre fue antiguo.
El ahora es nunca.
Trilogía de la memoria: II. Nunca es ahora
No puedo recordar
Tu pasado siempre
será nuevo. Tu futuro
siempre fue antiguo.
El ahora es nunca.
lo me está ocurriendo.
La parábola esconde
el cruce de caminos.
El momento en el
que el futuro es ahora,
en el que el ahora
es pasado: la esquina.
La sangre que
precede a la herida,
estaba esperando
al cuchillo.
Tu pasado siempre
será nuevo. Tu futuro
siempre fue antiguo.
El ahora es nunca.
Trilogía de la memoria: III. El antiguo futuro
Las personas suelen escribir
sobre lo que les ha pasado.
Yo suelo escribir
sobre lo que me futura.
No es un presentimiento
porque no es una intuición.
Es un presentimiento,
porque lo siento a destiempo.
La memoria inversa
del vidente que
olvida su pasado
para recordar su futuro.
Tu pasado siempre
será nuevo. Tu futuro
siempre fue antiguo.
El ahora es nunca.
será nuevo. Tu futuro
siempre fue antiguo.
El ahora es nunca.
lunes, 29 de febrero de 2016
Trilogía de la templanza: I. El zigzag premonitorio
Me hablas de tu pasado
de nuestro presente.
Te hablo de mi presente
de nuestro futuro.
Dormimos a destiempo
porque el soñar es celoso.
Cortamos con tijeras
las horas que tenemos.
No me crees cuando te digo
el rumbo que nos lleva.
No te creo cuando me dices
que vamos a la deriva.
Dos Cassandras poseídas
por su propia profecía.
Dos matryoshkas siamesas
que juegan a ser hidras.
Anticipamos la herida
en la calma que precede
la estampida: la caída
libre de la guillotina.
de nuestro presente.
Te hablo de mi presente
de nuestro futuro.
Dormimos a destiempo
porque el soñar es celoso.
Cortamos con tijeras
las horas que tenemos.
No me crees cuando te digo
el rumbo que nos lleva.
No te creo cuando me dices
que vamos a la deriva.
Dos Cassandras poseídas
por su propia profecía.
Dos matryoshkas siamesas
que juegan a ser hidras.
Anticipamos la herida
en la calma que precede
la estampida: la caída
libre de la guillotina.
Trilogía de la templanza: II. ¿Quién maneja tu barca?
Desde la otra orilla
veo barcos naufragar
y a otros seguir el rumbo.
El horizonte me corta los ojos,
no veo todo lo que existe,
ni existe todo lo que veo.
Veo el lento baile de la muerte,
la fragata fingiendo estar a flote
y el brusco hundimiento.
Veo el espejismo progresivo,
los fantasmas del barco pirata
que se alejan hasta desaparecer.
Anticipo el futuro como Cassandra,
descreída y descifrada, culpable
de conocer el rumbo y la deriva.
Trilogía de la templanza: III. Cortar en dos
Mi animal favorito son las tijeras
que cortan las serpientes en dos,
que cortan gemelos y siameses,
los días, las semanas y los meses.
Mi color favorito son las tijeras
que cortan la luz de la penumbra,
que cortan el blanco del negro,
las aguas, la tierra y el cielo.
Las tijeras que cortan
los cuellos de las jirafas
y los dedos de las palomas.
Las tijeras que cortan
la tela del mesías retratado,
la santa estampa del milagro.
que cortan las serpientes en dos,
que cortan gemelos y siameses,
los días, las semanas y los meses.
Mi color favorito son las tijeras
que cortan la luz de la penumbra,
que cortan el blanco del negro,
las aguas, la tierra y el cielo.
Las tijeras que cortan
los cuellos de las jirafas
y los dedos de las palomas.
Las tijeras que cortan
la tela del mesías retratado,
la santa estampa del milagro.
domingo, 28 de febrero de 2016
Trilogía del desamor: I. Los amantes del peligro
Los amantes del peligro
son cangrejos enredados en la marea,
una balanza sin medida del equilibrio.
Los amantes del peligro
temen la picadura del escorpión,
la flecha miope del centauro.
Los amantes del peligro
juegan a ser siameses espejo,
a ser vírgenes inmaculadas.
Los amantes del peligro
viven en los ciclos armónicos
y mueren en luna menguante.
son cangrejos enredados en la marea,
una balanza sin medida del equilibrio.
Los amantes del peligro
temen la picadura del escorpión,
la flecha miope del centauro.
Los amantes del peligro
juegan a ser siameses espejo,
a ser vírgenes inmaculadas.
Los amantes del peligro
viven en los ciclos armónicos
y mueren en luna menguante.
Trilogía del desamor: II. El patriarca de la ira
Llueve dentro de una casa sin techo,
las aguas cubren las esquinas,
el incensario no cesa de mojar
de humo de antiguos cristos muertos.
Llueve dentro de un cuerpo sin cabeza,
la sangre cubre los huesos,
los genitales no cesan de mojar
de humo de antiguos cristos muertos.
Llueven cuerpos sin cabeza,
casas sin techo, amores deshechos.
El hombre intenta atrapar el sentido
de todas las gotas de todas las lluvias,
recoge en el vientre el fuego
aireado de la nuevas vírgenes vivas.
El hombre intenta cimentar verbos
desenterrar verdades ocultas
asfixiarse en el vientre el fuego
aireado de las nuevas vírgenes vivas.
Trilogía del desamor: III. La matriarca arrepentida
Cientos de hilos y volantes
cosen la capa por la que
cientos de crías y gusanos
trepan con rabia.
La matriarca arrepentida
no puede ni mover las uñas
hasta el pelo tiene paralizado
en el temple del pánico.
Tuvo más de cien hijos
con la luna y la noche;
suavizó erizos hasta
la blanca caricia.
La matriarca arrepentida
devora una a una sus crías
por no poder quererlas
por no poder criarlas.
Reza desnuda en la laguna
a cualquier dios sintonizable
el estigma del cuchillo
clavado en el pecho.
Esta es la hija de los hombres,
la hija de la noche y las autovías,
la hija sin madre, devorada,
los pies sin cabeza.
martes, 23 de febrero de 2016
La torre: I. Rompecabezas
De ti me importa todo.
Desde que no estás
no me importa nada.
Solo importa la muerte.
La torre: II. Ciénaga
No es mucha la sangre
que queda en la bandeja de plata.
No muchas viudas llegaron
a la cima del monte del faro.
No son muchas las horas
del día ni de la noche
en las que no te siento
como un animal vivo
reptando las paredes
asfixiándose en el vientre.
Tu cara de niño perdido,
los ciervos en la autovía.
No es mucha la sangre
que queda en la herida.
No es mucha la sangre
que queda en la herida.
Pero sí son muchas
las espadas de San Jorge,
las cabezas del dragón,
los dolores de cabeza,
son muchas las noches,
la distancia que me separa,
mi ausencia sorda sonora,
la siempre sombra fría.
La torre: III. Lázaro
Levántame Lázaro
y lacera mi cuerpo de cerumen
de ojo abierto y tormenta cerrada.
·
Levántame Lázaro
e iza la bandera del desánimo
en mi territorio de fantasmas.
·
Levántame Lázaro
y llévame a la escena pasada
donde los amantes sobreviven.
·
Levántame Lázaro
por encima de mi cadáver
como una serpiente arrepentida.
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